Banco Sabadell y el portugués Banco Espirito Santo (BES) han presentado ofertas vinculantes para hacerse con Banco Gallego, cuyo proceso de subasta deberá resolverse antes de que finalice este mes.
Tras una primera fase en la que mostraron su interés estas dos entidades y la venezolana Banesco, este viernes expiró el plazo para presentar ofertas en firme por la entidad que preside Juan Manuel Urgoiti.
El banco luso ha confirmado, mediante un comunicado que ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), su interés por adquirir Banco Gallego, una entidad por la que ya se había interesado en los últimos años, aunque las negociaciones nunca fructificaron.
En la nota, la entidad que preside Ricardo Salgado señala que ha presentado su oferta vinculante "para la adquisición del 100% del capital social de Banco Gallego". "Esta propuesta se ha presentado dentro del proceso competitivo de venta y está sujeta a la verificación de las condiciones establecidas en la propuesta", añade.
Fuentes financieras han confirmado que también Banco Sabadell ha presentado su oferta este viernes, mientras que Banesco se ha retirado de la puja.
El proceso para la venta de la entidad gallega arrancó a finales del mes de febrero, cuando el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) distribuyó el cuaderno de venta entre varias entidades y abrió el plazo hasta el 5 de abril para presentar propuestas en firme. El propio director del fondo anunció en enero que la venta deberá estar resuelta antes de que comience mayo.
La subasta de Banco Gallego no incluye, como ya ocurrió con Catalunya Banc, un esquema de protección de activos (EPA). Fuentes financieras consideran que el menor tamaño de la primera la hace más fácil de integrar en otra entidad, a diferencia de la catalana, cuya subasta fue suspendida el pasado mes por el FROB, al considerar insuficientes las ofertas.
Así, Sabadell y BES han formalizado su interés en adquirir el 99,95% del Banco Gallego que ahora controla el fondo estatal, a través de NCG Banco, tras provocar una operación acordeón en la entidad, aprobada con sus votos en la junta de accionistas celebrada en enero.
Radiografía de la entidad
La ampliación de capital que siguió a la reducción a cero del capital se saldó con la aportación de 80 millones de euros del FROB, a través de NCG Banco, y otros 42.148 euros de otros accionistas.
De acuerdo con las cuentas aprobadas en esa misma junta, hasta octubre del año pasado el banco acumulaba unas pérdidas de 275 millones de euros. En diciembre de 2012 transfirió a la Sareb activos por 1.025 millones de euros y en febrero de este año el propio FROB cifró en 150 millones de euros el desfase patrimonial de Banco Gallego.
Además, el fondo estatal ha establecido unas quitas para los titulares de preferentes de la entidad que se sitúan, de media, en un 50%, aunque las operaciones están pendientes, precisamente, de que la entidad que se haga con Banco Gallego ofrezca alguna otra salida a los preferentistas.